osteocondrosis

osteocondrosis

osteocondrosises una patología de la columna, que se acompaña de cambios degenerativos-distróficos en los discos y tejidos de las vértebras. Bajo la influencia de factores desfavorables, se inician procesos destructivos en el tejido óseo y cartilaginoso, que cambian la forma de las vértebras y reducen la elasticidad del cartílago. Los síntomas de la enfermedad aumentan gradualmente y pueden empeorar considerablemente la calidad de vida del paciente, por lo que conviene acudir a un neurólogo para obtener ayuda.

El tratamiento de la osteocondrosis es a largo plazo e incluye muchos métodos. Para mantener los resultados de la terapia y aliviar los síntomas desagradables, se recomienda someterse a un masaje. El especialista identificará áreas de hipertonicidad y ayudará a que los músculos se relajen.


Razones para el desarrollo de la osteocondrosis.

Los cambios degenerativos en la columna suelen ser el resultado de la desnutrición del tejido óseo y cartilaginoso. Esto ocurre bajo la influencia de una combinación de factores predisponentes desfavorables:

  • predisposición hereditaria;
  • anomalías del desarrollo de la columna vertebral;
  • patologías del metabolismo, sistemas endocrinos y digestivos;
  • desarrollo físico defectuoso;
  • falta de vitaminas y minerales;
  • tomando ciertos medicamentos;
  • sobrepeso;
  • realizar trabajos físicos pesados;
  • distribución inadecuada de la carga durante ejercicios de fuerza con tensión excesiva en la columna;
  • lesiones de la columna vertebral;
  • falta de actividad física;
  • permanecer en una posición durante mucho tiempo.

Síntomas de la osteocondrosis.

  • Dolor en el cuello, espalda baja, hombros y espalda, que puede ser doloroso o punzante, constante o episódico.
  • Rigidez de movimientos.
  • Tensión de la espalda y músculos cervicales.
  • Sensación de piel de gallina en la piel.
  • Entumecimiento en brazos o piernas.
  • "lumbago" doloroso en la columna.
  • Aumento del dolor al asentir con la cabeza o al levantar los miembros superiores.
  • Ataques de mareos y dolores de cabeza.
  • Alta fatiga.
  • Ruido en los oídos.

Etapas de la osteocondrosis espinal.

La enfermedad se presenta en 4 etapas, siendo cada etapa posterior más grave que la anterior.

  • Nivel 1.
    Al comienzo de los cambios patológicos en la columna, el paciente generalmente no siente dolor. Pueden producirse ligeras molestias después de estar en una posición incómoda o realizar ejercicio físico. En esta etapa se produce una pérdida de humedad en el núcleo pulposo del disco cartilaginoso entre las vértebras, lo que provoca que su espesor disminuya y aparezcan grietas.

  • Etapa 2.
    Una mayor pérdida de líquido conduce a una disminución de la altura de los espacios entre las vértebras y a la formación de discos abultados. A medida que avanzan los procesos degenerativos, aparecen los primeros signos provocados por el pinzamiento de las raíces de los nervios espinales. El paciente comienza a sentir punzadas dolorosas al mover el cuerpo, la cabeza o las extremidades. En algunos casos aparece debilidad y dificultad para realizar el trabajo habitual.

  • Etapa 3.
    Los discos intervertebrales se vuelven muy delgados y pellizcan las terminaciones nerviosas; los cambios patológicos son claramente visibles en las radiografías. El paciente siente un dolor intenso y constante, que es difícil de aliviar con analgésicos fuertes.

  • Etapa 4.
    Un grado extremo de cambios patológicos, hay movilidad limitada de la columna y dolor pronunciado al intentar moverse. En el cuerpo vertebral y en los espacios intervertebrales se forman crecimientos óseos (osteofitos) que dañan los tejidos y las terminaciones nerviosas cercanas.

Tipos de osteocondrosis

El proceso degenerativo puede desarrollarse en diferentes partes de la columna vertebral, por lo que existen 3 tipos de osteocondrosis espinal:

  • lumbar;
  • pecho;
  • cervical.

Osteocondrosis cervical

La región cervical se considera la parte más móvil de la columna, por lo que está sujeta a cargas máximas. La enfermedad comienza con la deposición de sales y un aumento del tono de los músculos del cuello, lo que perjudica la circulación sanguínea en la cabeza. Con un tratamiento oportuno, la osteocondrosis de la columna cervical se puede tratar y culmina con la recuperación.

Síntomas de la osteocondrosis cervical.

  • crujidos, dolor y sensación de rigidez al mover la cabeza;
  • dificultad para respirar y sensación de falta de aire;
  • dolor y ardor en el área del corazón;
  • aumentos repentinos de la presión arterial;
  • mareo;
  • dolores de cabeza y migrañas;
  • entumecimiento de las manos;
  • sensación de un nudo en la garganta;
  • "moscas" parpadeantes en los ojos;
  • Ruido en los oídos.

Osteocondrosis torácica

Esta forma de la enfermedad es menos común debido a la baja movilidad de las vértebras en la región torácica. Por lo general, la patología ocurre en personas que se ven obligadas a permanecer sentadas en una posición durante mucho tiempo, por ejemplo, los camioneros. La osteocondrosis de la región torácica tiene síntomas similares a algunas patologías del corazón y los pulmones, por lo que es importante consultar a un médico a tiempo y realizar un diagnóstico.

Síntomas de la osteocondrosis torácica.

  • Sensación de opresión en el pecho.
  • Dolor en la zona de la espalda y el esternón.
  • Dolor entre los omóplatos al levantar los miembros superiores.
  • Manos entumecidas.
  • Sensación de falta de aire y dolor agudo (dorsago).
  • Dolor creciente y constante en el pecho (dorsalgia).

Osteocondrosis lumbar

La región lumbar tiene 5 vértebras. Si se altera la nutrición del tejido cartilaginoso entre las vértebras, el disco pierde su elasticidad, se vuelve más delgado y deja de realizar plenamente su función. En el contexto de tales cambios negativos, se desarrolla osteocondrosis de la región lumbar.

Síntomas de la osteocondrosis lumbar.

  • Dolor crónico en la zona lumbar, pelvis y extremidades inferiores, que se intensifica al moverse.
  • La parestesia es entumecimiento en ciertas áreas de la parte inferior del cuerpo.
  • Rigidez de movimientos.
  • Debilidad en las piernas.
  • Problemas para orinar: con la osteocondrosis lumbar, es posible que se produzca incontinencia urinaria episódica debido a una regulación nerviosa alterada.

Métodos para diagnosticar la osteocondrosis.

Un examen de rutina no es suficiente para hacer un diagnóstico, por lo que los especialistas se basan en datos de diagnóstico instrumentales. Para determinar la naturaleza y ubicación de las lesiones de la columna, se utilizan los siguientes métodos de examen:

  • radiografía de la columna: Se toman radiografías de diferentes partes de la columna en varias proyecciones;
  • tomografía computarizada (TC): durante el estudio, se crea un modelo tridimensional preciso de la columna, con la ayuda del cual se pueden identificar incluso las más mínimas desviaciones y hernias intervertebrales;
  • imágenes por resonancia magnética (MRI)— el estudio ayuda a identificar con la mayor precisión posible la ubicación y el grado de los cambios degenerativos en la columna.

Métodos de tratamiento para la osteocondrosis.

La enfermedad requiere un enfoque de tratamiento integrado, ya que los cambios degenerativos ocurren bajo la influencia de varios factores diferentes.

  • Analgésicos, antiinflamatorios y relajantes musculares para aliviar el dolor agudo.
  • Hacer dieta.
  • Fisioterapia: magnetoterapia y electroforesis.
  • Ejercicios terapéuticos, gimnasia y fisioterapia.
  • Masaje.
  • Terapia manual.
  • Reflexología para normalizar el tono muscular.
  • Electroforesis.
  • Tracción espinal para aumentar la distancia entre las vértebras y eliminar las terminaciones nerviosas pinzadas.

Prevención de la osteocondrosis espinal.

  • Formación de una postura correcta.
  • Descansos durante el trabajo sedentario prolongado, durante los cuales se pueden realizar ejercicios sencillos.
  • Levantando pesas con cuidado con un movimiento suave en media sentadilla.
  • Hacer ejercicio con regularidad y visitar la piscina: la natación tiene un efecto beneficioso sobre los músculos tensos.
  • Duerma en un colchón ortopédico con una almohada seleccionada adecuadamente; debe sostener el cuello, lo cual es especialmente importante en la osteocondrosis cervical.

¿A qué médico debo contactar si tengo osteocondrosis?

Un neurólogo puede hacer un diagnóstico y realizar un examen, basándose en los resultados del diagnóstico, determina el grado de la enfermedad y prescribe el tratamiento. Además, es posible que necesite la ayuda de especialistas especializados: un vertebrólogo, un acupunturista, un fisioterapeuta y un quiropráctico.

¿Cuándo ocurre la osteocondrosis?

La enfermedad afecta con mayor frecuencia a personas mayores de 30 a 35 años que llevan un estilo de vida sedentario. Para que se desencadenen procesos degenerativos en la columna deben estar presentes varios factores negativos, por ejemplo, el exceso de peso, la realización de trabajos físicos pesados o el trabajo sedentario. En este contexto, se interrumpe el suministro de sangre a los discos intervertebrales y dejan de funcionar normalmente bajo una mayor carga.

¿Cómo tratar la osteocondrosis?

El tratamiento de la enfermedad es complejo. Los analgésicos ayudan a aliviar el dolor: se toman en tabletas, se administran inyecciones intramusculares o intravenosas y también bloquean las raíces nerviosas comprimidas. Al paciente se le prescribe un curso de masajes, fisioterapia y fisioterapia. Si las terminaciones nerviosas están muy pellizcadas, se realiza tracción espinal.

¿Cómo dormir bien con osteocondrosis?

La higiene del sueño juega un papel importante en la prevención de las exacerbaciones de la osteocondrosis y en la prevención de su progresión. Es importante elegir el colchón adecuado: debe ser elástico y de dureza media. Es mejor elegir una almohada baja y los hombros no deben descansar sobre ella. Cuando esté acostado de lado, la almohada debe sostener su cuello. Se recomienda dormir de lado o boca arriba, dormir boca abajo no es deseable con la osteocondrosis. El dormitorio debe estar bien ventilado y a oscuras.